El traspaso de fondos de inversión entre bancos es una operación muy habitual, e incluso necesaria para diversificar nuestra cartera. De hecho es algo que conviene realizar cada cierto tiempo para actualizar nuestra inversión con los mejores productos en función de los cambios en el mercado.
Precisamente la facilidad que ofrecen los fondos de inversión para el traspaso es uno de los principales alicientes que tienen estos productos financieros, ya que cuentan con ventajas fiscales además de otras que pueden ofrecernos los propios bancos. No obstante, existen ciertos costes y particularidades que debemos tener en cuenta. Sigue leyendo, y tendrás toda la información que viniste buscando sobre este tema.
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En qué consiste el traspaso de fondos
El traspaso de fondos es una operación de reembolso de un fondo y suscripción de otro de forma inmediata, trasladando nuestra inversión. Este reembolso puede ser total o parcial, y siempre que la operación sea inmediata y se haga a través de una entidad gestora, y sin que el cliente disponga en ningún momento del reembolso, está exenta del pago de impuestos. De lo contrario, deberemos pagar a Hacienda entre un 19 y un 23% de las plusvalías.
De hecho esta ventaja fiscal con que cuentan los fondos de inversión -y de la que carecen otros productos- es la que aprovechan muchos inversores para aplazar los pagos a Hacienda y, de paso, aprovechar el beneficio acumulado que proporciona el interés compuesto. Por tanto es una opción muy útil que puede aumentar la rentabilidad de tu dinero y que puedes hacer las veces que quieras.
Este traspaso puede ser a su vez interno o externo dependiendo de si se hace a otro fondo en la misma entidad o si se opta por un traspaso a un fondo externo. Eso sí, debes tener en cuenta que, a efectos fiscales, se tiene en cuenta la antigüedad y el valor de la primera inversión –aunque luego se hayan hecho traspasos- a la hora de calcular las plusvalías o minusvalías en el momento de realizar el reembolso.
¿Cómo se realiza?
Para solicitar un traspaso el partícipe o inversor debe acudir a la gestora –habitualmente una entidad bancaria- donde esté el fondo en el que quiere invertir, informando sobre el fondo de origen, el de destino, y el capital que formará parte de la operación de traspaso; para facilitar ésta, conviene entregar al banco de destino una copia del extracto con la posición que tenga el cliente en el fondo original.
Tras verificar esta información, será entonces la entidad de destino la que solicitará a la de origen el traspaso de parte o todo el capital de un fondo; ésta a su vez comprobará los datos del partícipe y traspasará al banco destinatario tanto la información fiscal del cliente como el capital solicitado.
Antes de realizar el traspaso, no obstante, conviene asegurarse de que cumplimos todas las condiciones del fondo de destino; por ejemplo puede ocurrir que éste exija un capital mínimo para invertir que sea mayor que el que vamos a traspasar desde la entidad de origen.
¿Cuánto tiempo lleva el proceso, y cuánto cuesta?
En cuanto al tiempo necesario para la operación, varía dependiendo de si se hace dentro de la misma entidad o de un banco a otro, así como del tiempo que se necesite para transferir el capital reembolsado por el primer fondo y la información fiscal del partícipe. Si se hace dentro de la misma entidad un traspaso se hace en un máximo de 5 días hábiles, que pueden aumentar hasta 8 si es entre gestoras o bancos distintos por la complejidad de la operación.
En cuanto al coste de la operación, aunque es cierto que está incentivada fiscalmente y no tendremos que pagar impuestos, hay que tener en cuenta que un traspaso implica un reembolso del fondo original y una suscripción del fondo de destino, y ambas operaciones pueden –o no- estar sujetas a comisiones (especialmente el reembolso), dependiendo de las condiciones de cada fondo.
Por otro lado, si un fondo sólo admite bien reembolsos o bien suscripciones en determinado plazo, o si el traspaso es entre distintos países, los plazos e incluso los costes –incluyendo posibles impuestos- de la operación pueden variar; además, si el traspaso es desde un fondo garantizado aprovechando una ventana de liquidez, es mejor hacer antes un traspaso a un “fondo puente” para evitar pagar comisiones si la orden de traspaso no llega a tiempo.
¿Qué ventajas ofrecen los bancos para estas operaciones?
Aunque un traspaso de fondos puede estar sujeto a ciertos costes y comisiones, es aquí donde entran en juego las ofertas que ofrecen cada cierto tiempo muchas entidades por este tipo de operaciones, recompensado a los nuevos clientes con dinero o bonificaciones si traen su capital desde otros bancos o gestoras, por lo que tocará echar cuentas y ver si nos compensa o no mover nuestro dinero.
Las bonificaciones que ofrecen algunos bancos pueden llegar hasta los 10.000 euros por traspasar dinero a un determinado fondo; otros ofrecen un porcentaje de bonificación sobre el capital traspasado a cambio de cumplir ciertas condiciones, como un compromiso de permanencia por determinados años y un capital mínimo en la inversión.
Es importante no obstante tener en cuenta que a pesar de la publicidad, estas campañas para atraer clientes con fondos en otros bancos están normalmente limitadas al traspaso del capital a determinados fondos en concreto, y al cumplimiento de unos requisitos. Por tanto, antes de realizar un traspaso de fondos de inversión entre bancos deberemos evaluar si cumplimos las condiciones y si los incentivos se aplican al fondo que hemos elegido.